Estimular las capacidades cognitivas y emocionales de los niños desde la primera infancia es fundamental para el desarrollo de sus habilidades motoras y sociales. Ellos son un sujeto participativo con potencialidades que permiten movilizar el pensamiento, construir su aprendizaje y descubrir el mundo de forma natural, alegre y tranquila. Es por eso que nace el centro de Desarrollo Infantil aeioTÜ – Fundación Carulla, el cual a través de la implementación de la metodología Reggio Emilia, propone una experiencia educativa innovadora. Este es un modelo de aprendizaje en espiral en el que se tienen en cuenta, de manera integral, diferentes aspectos del crecimiento de los niños, con el fin de mejorar esa calidad de la atención en educación para la primera infancia en el país.
Desde estos centros se generan proyectos de investigación que buscan dar una experiencia educativa en la que no solo los niños conozcan las cosas sino que entiendan cómo funcionan. Es aquí donde las maestras cumplen un papel fundamental en este modelo de aeioTÜ, pues su tarea es identificar los intereses y habilidades de los niños para potencializarlos en su proceso de aprendizaje, desarrollando proyectos de investigación que permitan observar su entorno, animarlos a construir hipótesis y comprobarlas desde la experimentación con el mundo, la cual los llevará a sus propias conclusiones acerca de las teorías sobre la vida. Este es el origen de las Narrativas del viento.
¿Por qué Narrativas?
Los niños son los protagonistas de su proceso de aprendizaje que puede ser fortalecido a través de herramientas como el juego, el arte y el lenguaje literario. aeioTÜ, en la fase de evolución de la experiencia educativa, entiende a profundidad la importancia del lenguaje literario donde se cuentan historias, teatro, voz a voz, fotografías y el desarrollo del lenguaje grafico o plástico.
Dentro de estas herramientas se identificó que el lenguaje plástico es de gran importancia para que los niños plasmen lo que está pensando y comprenda su entorno.
¡Por qué el viento?
Se tomó como excusa, el viento, un fenómeno natural presente en todos los lugares y que genera gran curiosidad en los niños, quienes se cuestionan constantemente sobre su funcionamiento. Descubrimos interrogantes como ¿De dónde viene?, ¿A dónde va?, ¿Quién es su mamá? ¿Cómo es? ¿De qué color es? Esto se traduce en desarrollar el pensamiento creativo y movilizarlos en lo meta-cognitivo, más allá de lo cotidiano.
“aeioTÜ juega con el tema de la metáfora y el pensamiento imaginario porque es lo que no puedes tocar, pero te lleva a pensar. Es increíble como los niños son capaces de hacerse preguntas, de cuestionar, experimentar, concluir y teorizar y eso les permite co-construir su aprendizaje al estar en interacción con otro y con su entorno”. Dayini Arnedo, Coordinadora del Centro de Manzanillo del Mar.
La idea principal del proyecto de Investigación Narrativas del Viento fue provocar a los niños a través de experiencias que le permitan poner a prueba sus hipótesis sobre el origen del viento, poniendo sobre la mesa inquietudes que los llevaran a despertar su interés acerca de este elemento, generando diálogos importantes sobre los espacios donde se encuentra el viento y sus características.
Es así como se vivió una experiencia inigualable en el aula de exploradores: Niños de 2 y 3 años
Las hipótesis de los niños nos llevaron a explorar diferentes espacios para poder representar estas experiencias. Uno de los casos más curiosos fue la idea de Gabriel Monsalve, quien aseguraba que “el viento lo agarramos con un guante y lo metemos en una bolsa”.
Dejando volar la imaginación, también fue posible darle color y forma a este elemento, medir su cantidad y su fuerza, dándole cada vez más el espíritu investigativo de los niños, entendiendo que cada uno de ellos está en niveles diferentes de aprendizaje y tiene intereses y habilidades distintas.
Estos son algunos de los diálogos sobre el viento, después de ver un vídeo de una tormenta en el mar:
Emanuel: El viento es negro, gordo y grande y esta con mi abuelo cuando pesca
Gabriel: El viento está en el monte y es azul
Zareth: No, no, no el viento está en la playa y es verde
Gabriel: ¡No, azul!
Zareth: ¡No, Verde!
Gabriel: Yo agarre el viento con el guante de mi papá
Cristal: y lo metemos a la bolsa
Después de ver un ventarrón en el parque
Emanuel: el viento tiene cola para montarse en las matas
Gabriel: se sube con alas
Zareth: camina con los pies
Cristal: es un circulo
Junto a sus aliados, la Fundación Serena del Mar continuará incentivando en los niños la curiosidad por conocer más sobre el mundo que los rodea, por construir nuevos conceptos y por aprender desde sus capacidades, potenciando sus talentos de forma natural.
